Crujiente, sana y muy refrescante, la lechuga es una de las hortalizas indispensables en cualquier cocina. Se trata del ingrediente principal de muchas ensaladas, así como del complemento perfecto para hamburguesas, bocadillos u otros platos más elaborados como la ensaladilla rusa. Desde hace 2.500 años, el ser humano ha cultivado lechuga a lo largo y ancho de todo el planeta, siendo hoy en día un alimento muy apreciado, además de económico.
Existen numerosas variedades de lechuga alrededor del mundo, siendo algunas de las más comunes la romana, la batavia o la iceberg. La variación de formas y tamaños entre ellas es reseñable, aunque quizá lo más sorprendente sean los diferentes matices de sabor que las caracterizan, desde un agrio intenso hasta un dulce muy agradable al paladar.
La lechuga posee muchas propiedades nutritivas que la convierten en un alimento esencial en cualquier dieta. Destaca en ella su bajo contenido calórico (poco más de 15 kcal por 100 gramos), así como la presencia de vitaminas A (esencial para la vista, la piel el cabello y el sistema inmunológico), C (muy importante por actuar como antioxidante) y E (aportan estabilidad a las células sanguíneas), fibra, potasio, proteínas, magnesio e incluso calcio.
Por todo ello, cultivar tus propias lechugas supondrá una satisfacción no sólo recreativa sino que también reportará importantes beneficios a tu salud.
¿Qué tipo de tierra necesitamos para plantar lechugas?
Se recomienda una tierra rica en humus y fresca.
¿Cuándo debemos sembrar la lechuga?
La lechuga se puede sembrar desde Abril hasta Septiembre.
¿Cuándo tenemos que recolectar nuestras lechugas?
Normalmente un mes después de la siembra, aunque hay veces que es conveniente dejarlos hasta 3 ó 4 semanas más.
Consejos a la hora de cómo plantar la lechuga en nuestro huerto en casa.
– Uso de mantillos para mantener la tierra fresca.
– Se adapta perfectamente tanto a la jardinera como a una maceta de unos 25 cm. de diámetro.
– Es muy recomendable que la planta se encuentra a la sombra buena parte del día.
– Para plantar la lechuga basta con realizar un surco de medio centímetro de profundidad aproximadamente y colocar las semillas, volvemos a taparlo con una fina capa de mantillo, regamos y listo.